¿Cuántas de aquí tienen un clóset lleno de nada que ponerse? O les parece casi una tarea titánica llegar a tiempo en las mañanas, porque pasan horas sacando cosas. Al final terminan con un desorden terrible y usando lo primero que sacaron antes de que llegara el caos.
Querida lectora quizás tu ropa no sea el problema, sino la forma en la que está organizada. Como siempre decimos, todo entra por los ojos, y yo me pregunto, ¿qué sientes cuando abres las puertas de tu clóset?
Si la respuesta es angustia, desorden y confusión… ¡Tranquila! A todas nos ha pasado alguna vez en la vida. La idea es sacarle el mayor provecho a tu clóset para que puedas ser mucho más productiva al momento de arreglarte.
Aprende a dejar ir
Este es el primer paso para que tu clóset pueda respirar. Muchas asesoras de imagen, recomiendan dejar ir todas esas prendas que no hayas usado en un año o dos, y es totalmente válido. Sin embargo, algo que a mí me sirvió muchísimo fue hacerme la siguiente pregunta: ¿Si en este momento estuvieras en una tienda volverías a comprar esa prenda? Si la respuesta es negativa, respira y déjala ir.
Coloca dos contenedores, uno para donar y otro para desechar. Por ningún motivo dejes que otros miembros de tu familia vean estos contenedores, ya que es muy probable que a ellos también les cueste dejar ir. Piensa que es un momento sólo para ti.
Sé que no es fácil, muchas de esas pertenencias han estado contigo por muchos años. Pero como todo en la vida, cumplen un ciclo. Más que una carga, será un momento reparador, sentirás como si te quitaras un peso de encima y esto permitirá darle el espacio apropiado a todo aquello que realmente te quede bien y te haga feliz ahora.
¡Y esa es la clave! Así como no debes dejar que personas negativas entren a tu vida, no acumules cosas que no te aporten dentro de tus espacios. Quédate sólo con lo que te haga feliz.
Establece Jerarquías
Una vez tu espacio quede liberado, piensa en tus actividades. Siempre recuerda: Cada cosa tiene que tener un lugar.
Lo importante es que tengas todo a la vista, y que coloques todo según su uso y jerarquía. Es decir, la ropa para ir a trabajar debe ir junta, la de los fines de semana también, o la de compromisos más formales igual. De esta misma manera, lo que más uses, siempre debe quedar más a la mano.
Los sacos, casacas, blusas, vestidos y pantalones de vestir, es preferible tenerlos colgados, para evitar arrugas. Las chompas, polos, jeans y buzos, puedes tenerlos doblados en cajones o repisas.
Los zapatos y las carteras pueden estar en repisas. Deja a la mano los de la temporada y los que uses con mayor frecuencia.
Saca el mayor provecho
Trata de sacar el mayor provecho a cada rincón de tu clóset. Mira en qué zonas puedes incluir un tubo bajo adicional, o repisas extras. Todo se vale al momento de tenerlo todo a la vista y organizado. Puedes inspirarte en fotos de Internet o contratar a un profesional para que diseñe un clóset a tu medida.
Si vives en un lugar alquilado y no puedes realizar muchos cambios, puedes conseguir cajoneras listas para colocar dentro del clóset, que luego puedas sacar y llevar contigo en caso ya no vivas en el mismo lugar. Dependiendo de tu presupuesto éstas pueden ser de melamina o de plástico. Evita usar colores oscuros si tu espacio es pequeño, además siempre es mejor ir a lo seguro, el blanco o transparentes es una opción ideal para aportar luz y ver todo con mayor claridad.
Es importante invertir en unos buenos colgadores.
Los que entregan en las lavanderías son de uso temporal, ya que a la larga marcan las hebras y así deterioran tus prendas. Además de ser poco prácticos, ya que la ropa suele caerse. Busca unos de madera, o de fibras sintéticas, que sean suaves con tu ropa. De preferencia, cómpralos en un solo color y que este sea un neutro, para que no generen ruido visual y se sienta el espacio desordenando.
De la misma forma, tus cajones necesitan compartimientos extras. Busca todo aquello que pueda servirte para delimitar zonas, sobre todo cuando guardes cosas pequeñas. Puedes usar cajas, bandejas plásticas, etc, para mantener todo en su sitio.
Tu clóset o armario dice mucho de tu personalidad. Sí tienes todo a tu alcance, veras la diferencia. No lo dejes para después, empieza hoy y verás cuanto tiempo y dinero vas a ahorrarte en tu día a día!
Aprovecha el fin de semana, descarta, dona y así sabrás si es que necesitas algo nuevo!
2 Comments
Es recomendable organizarlo por colores ? Para poder ver las combinaciones me recomiendan eso?
Hola Heidy, en la medida de lo posible sí! El efecto de tener tu ropa ordenada por colores, no solo elimina el ruido visual del que tanto hablamos, sino que además sabes exactamente donde se encuentra cada cosa. Sin embargo y dependiendo de tus ocupaciones diarias, debes procurar concentrar juntas la ropa por categorías, la del trabajo por un lado, la de los fines de semana por otro, para que no pierdas tiempo al momento de arreglarte por las mañanas. Lo que yo te recomiendo es primero ordenarla de acuerdo a la función y luego por color.